Con la detención a fines de julio en Bolivia del sacerdote relacionado al narcotráfico, vuelve a colocarse a la vindicta pública no ya la inservible acción de las religiones para resolver problemas mundanales sino como las supersticiones perjudican todo emprendimiento humano.
A Valentín Mejillones, alias Akharapi, la yuta lo encontró con 240 kg de cocaína liquida en su casa de La Paz.
El caso Akharapi es más entretenido que el de los pedofilos católicos porque las religiones ancestrales convocan, como la miel a las moscas, a una fauna de “izquierdistas y progres” de todo el mundo, incapaces de relacionar que el oficio sacerdotal fue diseñado desde el principio de los tiempos para permitir toda clase de manoseo y abusos, desde los sexuales hasta los económicos, sobre los ingenuos creyentes.
El pícaro Mejillones alias Akharapi se había entusiasmado con su papel de amauta (sabio, guía espiritual Aymará), -rol mejor interpretado por el “negro” Olmedo- y hasta había logrado que lo tomaran en serio aprovechando los vientos de indigenismo trucho (IT) instalado por el Gobierno de Evo y Álvaro García Linera. El sumo sacerdote Mejillones se dio el gusto como supremo Aymará de “coronar” y entregar el bastón en 2006 al presidente Morales.
El indigenismo en Latinoamérica fue la opción usada por los candidatos triunfantes en Bolivia y Ecuador; en ambas naciones durante años hubo varios levantamientos populares, entre ellos “La Guerra del Agua” y “del Gas”, cayeron gobiernos y las gestas populares fueron preparando el terreno para que el indigenismo llegara al poder.
Evo Morales ganó la presidencia montado en la Fejuve (Federación de Juntas Vecinales de El Alto), movimiento protagonista de la Guerra del Gas en 2003, que provocó la caída del “gringo” Gonzalo Sánchez de Lozada. El retorno al Tawantinsuyo y el tema de las 36 naciones precolombinas fue el peaje que Evo y García Linera pagaron para llegar.
En Ecuador, Rafael Correa tuvo el apoyo de la Conaie (Confederación de Nacionalidad Indígena del Ecuador), protagonista de una decena de levantamientos desde 1990 que derribaron tres gobiernos.
Los coqueteos a compañeros indígenas estuvieron a la orden durante años aunque en uno y otro país jamás fue cuestionada la dirección capitalista del régimen.
La historieta de 36 naciones indígenas tuvo patas cortas: según la Confederación Indígenas de Bolivia la Nación Nahua tiene 15 personas, la Pacahuara 25, la Guarasugwe 31, la Yaminahua 39, la Reyesana 53, la Yuki 153, la Tapiete 174, la Machinieri 195, la Moré 360. Los antropólogos buscaron a las naciones Toronoma y Joaquiniana y no las encontraron. Hay 11 naciones con menos de 400 personas. Otras 15 no llegan a 3000. Las únicas significativas son la Chiquitana con 61.250; la Moxeña con 76.073; la Aymará con 1.549.320 y la Quechua con 2.556.277. El proyecto reconoce 36 idiomas oficiales, incluso el Toronoma y el Joaquiniano y fue redactado en 2007, a 3 años del censo 2004. “(La Prensa 3/8/08)
En Bolivia el Tawantinsuyo y las 36 naciones fueron desapareciendo del discurso oficial, lo único que quedó firme es la entrega a EEUU y la Banca foránea del manejo de las reservas monetarias.
El IT es usado por las transnacionales que dominan países dependientes mientras explotan reservas mineras y petroleras y enajenan tierras.
Un ejemplo trágico está en Argentina: Benetton primero expulsó a familias mapuches, luego les compró 900.000 Ha. y después reunido con los mismos acordó abrirles una sede en Inglaterra donde funciona la Nación Mapuche , la que ¡ya tiene bandera! Es cortar en fetas a las Naciones postradas y gobernadas por corruptos.
Las iniciativas expropiadoras enancadas en el IT son infinitas: en el norte de La Paz , indígenas que tienen abogados asentados ¡¡en Bruselas!! piden que éstos negocien con el Estado boliviano la autorización para la exploración petrolera.
Las ONGs aprovechan el IT para hacer tabla rasa con el concepto de nación, comunidad y pueblo. La verborragia encubre al imperialismo y es financiada por USAID, UE, Banco Mundial y el BID.
En la Argentina los Kakos instruyeron a Milagrito Sala, jefa de la barra brava de Gimnasia de Jujuy, para ingresar al negocio de la intermediación internacional de tierras coronada de plumas.
Así es que arrió a nuestros hermanos cabecitas negras como ganado en un operativo millonario de cientos de micros en la “Marcha Nacional de los Pueblos Originarios”, que atravesó todo el país y disfrazados como organizaciones indígenas llegaron a Plaza de Mayo el 24/5.
Para que esa Armada Brancaleone fuera recibida por CFK, primero Milagrito le afanó al Encuentro Nacional de Pueblos Originarios (conformado por 26 organizaciones indígenas), documentos elaborados por ellos presentándolos como propios en el Bicentenario. http//:neuquelandia.zobyhost.com
En Bolivia el 27/6 Fejuve planteó en su Manifiesto Político del XVI Congreso Ordinario (www.alminuto.com.bo) que “pese a tener un presidente indígena como Evo, Bolivia sigue gobernada por la oligarquía criolla, mantiene el sistema capitalista y el pobrerío sigue siendo dominado políticamente, explotado económicamente, marginado racial y culturalmente”. Los 2400 delegados del Fejuve reafirmaron la lucha por nacionalizar los hidrocarburos, expropiando sin pago a las transnacionales y en el camino “sepultar al sistema capitalista”.
El cartón pintado no aguanta una lluvia, la historia como el asesino vuelve a la escena del crimen.
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